domingo, marzo 20, 2005

"Fui al baño. Había sol."

Esta noche ha sido uno de esos días grandes. Si ya la semana pasada tuvimos muy buenos momentos en el cumple de Ángel, hoy celebrando el santo de Bot ha sido la repera. Momentos por los que sin duda vale la pena ser un piltrafilla de esta gran panda de cernícalos, buitres y/o cenutrios coleantes que somos (cada uno apúntese a la especie más afín XD). Una celebración que casi no podemos realizar porque a las 8 todavía no había víveres comprados y el principal proveedor (Mercadona) estaba cerrado por fiesta. Menos mal que recordé unas sabias palabras de nosequién que escuché a mediodía: "Pues creo que están comprando en el Infante". Convenzo al anfitrión para acercarnos allí y... oh, milagro, el hiperoski estaba abierto para aprovisionarnos. Resultado: una muy grata cena salpicada de cientos de buenos recuerdos (y de buenorras del recuerdo). Vaya, otra vez la época institutil sale a colación ;) Esta vez con repaso exhaustivo a la orla de COU (ranking positivo y negativo incluídos).

Y luego, la mejor parte. El visionado, finalmente, de la antológica fiesta que fue celebrada hace unos dos años en Alhama. Antes de dar al play se hace un juramento hipocrático: "Somos amigos, nadie reprochará nada a nadie". Juramento que el principal destinatario no suscribe :S ¡¡¡uy uy uy!!!

Creo que no me reía tanto desde hace años. Menudo "desféis", gente con más alcohol que sangre en las venas, y unas ganas de despiporre que daba miedo. Momento salvaje: cocina de Fer. Sin palabras.

Tras varias secuencias dignas del Globo de Oro a la mejor comedia (algunas por las imágenes, otras por los comentarios que ya quisieran los guionistas de American Pie), llega el momento estelar: la escena que da título a este post y que resume la fiesta en su conjunto. Unos versos que salieron de las neuronas etílicamente empapadas de Ángel. Un recital poético que ni de lejos imita Neruda con su me gusta cuando callas porque estás como ausente:

Fui al baño.
Había sol.
Te lo juro.
Y ahora, Valme: ¡ya no hay sol!


Sublime el gesto ocular y mandibular. Vimos esta escena hasta 8 veces seguidas, y en todas acabábamos desternillados de la risa. Increíble. Secándonos las lágrimas, continuamos viendo el vídeo y luego, al centro, acompañados por el comando Alhama (¡besotes para todas!). Un ratito en Pasadena (qué agobio, pero buen ambiente en general). Aquí pudimos ver a Toni, Gsú y Joselito Triunfito en tiradas de caña a discreción pero, curiosamente, cada uno por separado. Después estuvimos muy poquito tiempo en Teatro Circo (tiene pinta chula el local este, habrá que apuntarlo para otra ocasión). Al salir de ahí ya el cansancio pudo con varios de nosotros y nos volvimos. Supongo que los demás, a esta hora, aún siguen de fiesta. Ya se contarán.

Menudo aperitivo fiestero para lo que está todavía por venir...